DESPEDIDA
A toda la comunidad escolar del
colegio Castilla La Mancha:
Ha llegado el momento de despedirme
de mi colegio, de mis queridos compañeros, de las familias y de mis preciosos
niños.
Es difícil resumir 21 años en unas
líneas, muchos son los sentimientos que me surgen, pero hay uno que llena mi
corazón: EL CARIÑO. He sido afortunada al trabajar en la profesión más bonita
que existe en la que he recibido muchísimo amor de mis pequeñines. Ellos me han
contagiado su curiosidad, su alegría y su inocencia…son un tesoro que he
intentado educar y cuidar como a mis propios hijos.
Hace muchos años leí un precioso
poema de Gabriel Celaya. Fue muy inspirador para mí y espero haber conseguido
cumplir su mensaje en alguno o alguna de los muchos niños y niñas que han
pasado por mi vida profesional. Dice así.
Educar es lo
mismo
que poner un motor a una barca,
hay que medir, pensar, equilibrar,
y poner todo en marcha.
Pero para eso,
uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino,
un poco de pirata,
un poco de poeta,
y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar,
mientras uno trabaja,
que esa barca, ese niño
irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes, hacia islas lejanas.
Soñar que cuando un día
esté durmiendo nuestro propio barco,
en barcos nuevos seguirá nuestra bandera
enarbolada.
Yo me bajo aquí pero siempre
formaréis parte de mi vida y espero que yo lo sea de las vuestras, por eso no
os digo adiós, os digo hasta siempre y espero que si algún día os acordáis de
mi lo hagáis con cariño y con una sonrisa. Os deseo toda la felicidad del mundo y un
futuro lleno de alegrías. Un abrazo inmenso a todos, GRACIAS
Felisa
Sánchez Marín
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja aquí tu comentario y no olvides identificarte. Gracias